En el pasado, el vidrio fue
utilizado en
ventanas pequeñas, aplicaciones destinadas a mantener el clima,
ya que
permitirían que la luz ingresara y proporcionaban una vista de la
parte exterior.
Sin embargo, hoy el vidrio
arquitectónico se utiliza para controlar los elementos, la ganancia o pérdida
de calor, para brindar confort térmico, para permitir que la luz del día
natural ilumine edificios y para seguridad y protección, junto con la
agradable estética y apariencia que dan las líneas del vidrio limpio.
Algunos ejemplos comunes del
uso del vidrio incluyen: ventanas en viviendas, edificios comerciales, ventanas
para equipo de transporte, divisiones interiores, sistemas de barandilla,
arte decorativo, muebles y accesorios.
Estos usos se traducen en beneficios
para proyectos arquitectónicos. Además de los elementos de estética,
seguridad y protección, el vidrio arquitectónico de alto rendimiento de
hoy, reduce los gastos de energía.
Están diseñados para dar un
máximo rendimiento, este tipo de vidrio tiene muchas ventajas y durará
durante toda la vida del edificio. Conócelo y adquiérelo.